lunes, 23 de noviembre de 2009

El sol se esconde en la marisma

Hola a todos!!, en esta entrada os quiero mostrar uno de esos bonitos atardeceres que se pueden observar en la marisma... Los esteros como ya os expliqué, son las marismas que el hombre transformó para usarlas como salinas y zona de cultivo de peces..., su entramado de caños y muros, forman un ecosistema donde viven gran cantidad de especies, desde pequeños invertebrados hasta aves limícolas que se alimentan de éstos, también grandes aves ictiófagas como cormoranes, cigüeñas, garzas..., se alimentan en estas superficiales aguas donde encuentran peces de todos los tamaños, sin dejar a un lado los elegantes flamencos y las espátulas, que cada vez más se observan en este entorno...





Con estas fotos he querido captar como es un atardecer en este paisaje marismeño, quiero que observéis las distintas tonalidades que se van obteniendo conforme el sol cae hasta esconderse por completo... En estas primeras fotos, el sol ya está muy bajo, un revuelo de aves se escucha en todo el estero buscando un lugar resguardado donde harán de él su dormidero... Los rayos de luz en estos momentos, de una tonalidad amarillenta, inciden en la lámina de agua creando bonitos reflejos...









Conforme el sol va cayendo, la tonalidad amarillenta se desvanece y el agua adquiere ahora un color metalizado más oscuro, el sol ya casi se ha escondido...




Cuando ya solo asoman los últimos rayos del atardecer, todo el estero se transforma, la tonalidad naranja reflejada convierte el paisaje en una deslumbrante escena, los colores de la vegetación ya no se perciben, éstos han oscurecido, solo predomina la tonalidad naranja tornando a rojiza de las últimas luces... Las aves permanecen en silencio, ya ha llegado la noche y la marisma descansa hasta que asomen los nuevos rayos de luz, la luz del amanecer...







Quiero dar las gracias nuevamente a todos los que visitan este blog, me gusta responder a todos los que se van incorporando personalmente auque a veces quiero llevar tantas cosas que se me van escapando, pero me siento tremendamente agradecida por vuestro seguimiento y todos vuestros comentarios, muchas gracias a todos...

lunes, 16 de noviembre de 2009

Entre pinos y flautas...

Hola a todos..., entre "pinos" y flautas hace mucho que no publico, voy con retraso así que voy ponerme al día publicando aquellas cositas que se me han quedado atrás... En esta entrada os pondré una de las salidas que hice, en la que viendo que se habían animado los níscalos en salir, la finalidad de ésta era el encuentro de gran variedad de setas..., aunque tuve otros encuentros diferentes pero que me sirvieron para consolar el escaseo de éstas...


Nada más bajar de mi casa me fui directa al coche, cuando observo junto a éste en un terraplén, unas garcillas bueyeras que andaban buscando su desayuno..., por supuesto no iba a desaprovechar ese momento en el que con mi escaso objetivo las podría sacar bien de cerca, así que me dispuse sacar tomas de como rebuscaban entre la hierba insectos o lagartijillas... Vaya!!, empieza bien la cosa...!!, pensé yo, entonces animada con las tomas que había sacado a mis garcillas me metí en el coche y puse música para animarme un poquillo más, parecía que iba a ser un buen día fotográfico...




Me puse en marcha dirección al pinar de la Breña, ya en su día publiqué un recorrido por este pinar que comenzaba en Barbate, atravesaba unos acantilados alucinantes y terminaba en la playa de los Caños, pero como ya os hice ese recorrido fotográfico, en esta entrada solo me centraré en la búsqueda de setas que fue a lo que fui realmente... Empecé por otro tramo por donde se llega directamente al pinar, es un pinar bastante denso, donde el matorral lo forman lentiscos, retamas, coscojas, jaras..., entre muchas más, porque es un pinar con mucha vegetación y muy variada, he de reconocer que el momento más bonito para visitarlo es la primavera, que es cuando las plantas florecen y podemos encontrar más especies aún... Bueno aquí os pongo una foto donde se más o menos como es éste...


Comencé a pasear mirando al suelo, pero ninguna seta asomaba entre su sustrato arenoso típico de los pinares costeros..., níscalos quizás era la seta que menos esperaba ver, pues cuando comencé a caminar me encontré con algún recogedor de setas de vuelta y con la cesta vacía, me parece que no había tenido una buena cosecha esa vez... Pero mirando y mirando asomar esta pequeñeces que casi pasaban desapercibidas, una incluso rota o comida por algún animalillo, pero como no había otra cosa mejor le saqué fotos para luego poder identificarla, aunque al día de hoy aún no lo he hecho, creo que es de las más difíciles..., bueno, yo creo que es que estoy bastante pegada en ésto...


Como no encontraba más setas y tenía ganas de echar cuerpo a tierra, me puse a practicar el tumbing con unas piñas de los pinos piñoneros que componen el pinar, que de éstas sí que había en cantidad..., y al menos si no había setas no me iba con las manos vacías...




Pero por fin otra especie también casi oculta bajo la arena y exactamente del mismo color, reapareció ante mis pasos..., también pequeña y con un aspecto casi seco, parecía estar pidiendo agua...




Continué el camino por este bonito pinar, carboneros, petirrojos..., se escuchaban entre los árboles pero se perdían a la vista con gran rapidez, tras perseguirlos un rato con la cámara decidí dejar los pajaritos para otro día y seguir buscando setas, que ese era mi cometido...




Atravesé este cortafuegos que hicieron por si un incedio de verano se quisiese hacer con el pinar, por desgracia estas cosas ocurren...


Es muy frecuente encontrarse estas anidaderas de madera colgadas de las ramas de los pinos, la primavera será un buen momento para ir a observarlas...


Otra vez aburrida de no encontrar más, voví a poner en práctica el cuerpo a tierra con unas florecillas que se encontraban a ras del suelo...


Pocas plantas lucían sus flores por estas fechas, solo éstas y una flor de jara, que no sé muy bien como permanecía allí pude encontrar...


Continué con el paseo, y aleluya!!, una seta más..., con un sombrero rojo y en buenas condiciones se encontraba, allí sola sin compañía de ninguna más, pero parecía muy bonita y no con ese aspecto tan seco..., según mi guía para salir del paso, algún tipo de Russula puede ser, pero hay muchas parecidas..., y yo decía que los limícolas eran complicados...




Tras sacar nuevas tomas de ésta, me dispuse a andar de nuevo y entre las jaras, vaya!, parece que las orugas precesionarias ya están saliendo..., allí estaba ésta dándose el festín de hojas de jaras, son muy bonitas, pero no es muy aconsejable acercarse mucho a ellas, sobre todo el que tenga un perro sabrá el por qué..., sus pelitos urticantes son un grave peligro para éstos, que a veces todo lo que encuentran lo muerden..., así que ya sabéis, cuidaíto si lleváis un perro a un pinar cargadito de procesionarias...





Seguí caminando, aunque ya de vuelta, pero antes de finalizar mi paseo puede encontrar dos setas más, la primara parecía la misma que la anterior, alguna Russula seguro... La última fue justo al final del recorrido, ésta era otra especie, amarilla y carnosa y en un pequeño grupo asomaba entre las acículas...



Bueno, al final no estuvo tan mal la cosa, pero esperaba encontrar gran cantidad de especies en ese pinar..., como ya véis ni un níscalo pude ver, el hombre de la cesta ya me lo dio a entender..., y como ya dije en la anterior entrada aún falta mucha agua para que terminen de arrancar, no sé si tendremos que cantar..., que llueva que llueva la virgen de la cueva..., pero lo que sí, es que los campos están pidiendo agua a voces, esperemos que lleguen pronto...

domingo, 1 de noviembre de 2009

Primeros níscalos

Parece ser que comienza la temporada de setas..., me sorprendió encontrarme con estos níscalos, ya que aún ha llovido muy poco y con estas temperaturas tan altas pensaba que la tierra no estaba lo suficiente empapada como para empujar a la afloración de éstos..., pero en un sombrío pinar, donde las micorrizas permanecen latentes en las raices de sus pinos durante todo el año, las pocas gotas que han caído paracen ser suficientes para que los níscalos empujen con fuerza las acículas de los pinos buscando la superficie... Estos que os muestros son los primeros que he visto este año, únicos pero hermosos mostraban así sus suculentos sombreros anaranjados... Son tres las características que cumplen los sabrosos níscalos para su identificación, la primera es que el sombrero posea una serie de aros concéntricos anaranjados, cuando la seta envejece el sombrero puede tornar a un color verdoso..., la segunda es que posean laminas debajo del sombrero de color amarillento, y la tercera es que al cortar su pié o las láminas, segregue un jugo también de color naranja..., en teoría si cumplen estas tres características estaremos ante un níscalo, pero yo por si acaso prefiero no fiarme y solo recogerlas cuando alguien experimentado me lo confirme...


Ganas me entraron no os creáis de desgustar estos níscalos salteados y condimentados con ajito y perejil..., pero a parte de no fiarme a la plenitud, los ví tan bonitos, tan hermosos..., los primeros níscalos del año permanecían allí recien salidos en la inmensidad de ese pinar..., que me dio pena destrozar una imagen tan bonita que la naturaleza me mostraba..., así que me dispuse a, en vez de verlos salteados en la sartén, verlos tal y como me las encontré en la pantalla de mi ordenador..., puede que incluso así me gusten más...


Por último os muestro aquí los pinares donde éstos abundan, sulen ser pinares de matorral bajo, éste en particular está bastante pelado ya que eliminan casi todo el matorral para evitar incedios. Al ser estos pinares densos y sombríos, la tierra conserva la humedad suficiente y necesaria para que se den las condiciones óptimas para este tipo de setas...




Bueno, esperemos que vengan pronto las lluvias, que este cambio climático lo trae todo desvariado..., y que pronto podramos disfrutar de pinares llenos de níscalos y multitud de setas más...