lunes, 26 de octubre de 2015

Bebés, o ancianos

Es curioso como cualquier ser recién nacido, ya sea mamífero, ave o incluso un pez, sea de la especie que sea puede llegar a despertar en nosotros ternura, hacer sonreír y poner a flor de piel ese instinto de protección. A veces con tan solo mirarnos, y si esto no ocurre solo tienen que emitir cualquier sonido propio de los seres pequeños recién nacidos, que en seguida nos alertarán haciéndonos sentir ese impulso de protegerlos. La naturaleza es sabia y nos ha diseñado para que el recién llegado al mundo, no se sienta desvalido y pueda salir adelante al amparo de los adultos. Pero también no deja de ser curioso como este mismo instinto que nos sucede con los recién nacidos, nos aflora nuevamente con los más ancianos. Cuando vemos por ejemplo, una abuelita a la que le cuesta andar, no nos deja impasibles y nuestra tendencia es el ayudar, agarrarle del brazo para que ese andar le resulte menos insufrible. Esa mezcla de sentimientos, de querer ayudar y proteger al ser desvalido y de ternura a la vez, vuelve a despertar en nosotros, y esta vez acompañado de un sentimiento de respeto y admiración. La naturaleza nos ha diseñado para que también protejamos al más anciano, y también nos dice que lo respetemos, admiremos y escuchemos pues tienen mucho que enseñar... Esto igualmente nos sucede, no solo con humanos, también cuando observamos la avanzada edad o ancianidad de cualquier otro ser incluso un viejo árbol, como si ese abuelo tuviese que contarnos algo, y quizás lo tenga... Así que respetemos a todos esos seres, pequeños o ancianos, sean humanos o no, porque requieren de nuestra protección y porque nos aportarán sabias lecciones de esta vida también.





jueves, 22 de octubre de 2015

Dos colores...

Cuando damos un paseo por el monte o nos encontramos inmersos en la naturaleza, normalmente percibimos detalles de este que lo caracterizan, olores, sonidos, luces..., incluso sin ser consciente de ello, y que cuando los ves o te topas con estos fuera de allí te traen inmediatamente a la cabeza ese lugar... Algunas de estas percepciones que nos impregnan visualmente cuando nos encontramos sumidos en ese espacio son los colores. Si visitamos por ejemplo un bosque del norte peninsular, en otoño, sin lugar a dudas será la amplia gama de rojos, amarillos y ocres que impera en estos bosques mixtos de hayas, robles o abedules..., la que percibimos y retendremos. Aquí en el sur, en concreto en los Alcornocales, no existe una gama tan amplia ni tan marcada, pero si que destacan y se perciben dos colores principales durante todo el año, o al menos así lo percibo yo. Uno, es el verde cenizo del monte mediterráneo de quejigos, acebuches, brezos y retamas... Y el segundo el rojo, el rojo que lucen los alcornoques tras ser desprendidos de su piel de corcho. Y el rojo característico de las retintas, ganado vacuno emblemático de estos parajes, bastante resistentes y que se crían montunas campeando por sus intrincadas sierras.


miércoles, 14 de octubre de 2015

El mirlo acuático

Es curioso como en los generosos caudales de ríos y arroyos del norte, no es difícil observar con cierta facilidad al mirlo acuático. Requieren de ríos limpios y que fluyen con abundante agua, se suelen posar en las rocas y cantos rodados,  y entre ellos no dejan de buscar pequeños invertebrados acuáticos para alimentarse. Pensé que estas preciosas aves que tan difícil de observar son en el sur, eran bastante territoriales, y que cada una defendía y recorría largos tramos de río. Sin embargo pude observar que en un pequeño tramo cohabitaban hasta tres individuos, quizás fuesen los descendientes de ese año no sé..., pero parece que no se entormpecía mucho unas a otras, y cada una revoleteaba sin problemas en un sentido y en otro, posándose, sesteando, acicalándose, entre el borboteo y fluir del agua.





domingo, 4 de octubre de 2015

De marmotas...

Uno de los personajes que pudimos observar en este recorrido por los Pirineos, concretamente en Andorra y en el parque nacional de Aigüestorte, fueron las marmotas (Marmota marmota). Es un roedor que nunca había tenido la ocasión de ver, así que me encantó era uno de mis objetivos. 

Las marmotas estuvieron presentes por toda Europa, restos fósiles lo demuestran, y en España se distriyeron por los Pirineos ocupando también el área francesa, pero desaparecieron no sé bien la causa ni en qué año. Fueron reintroducidas de nuevo entre los 50-60 y poco a poco se fueron expandiendo por algunas zonas, alcanzando mayor presencia en el pirineo aragonés. 

Estos animales son muy difíciles de localizar y pueden pasar totalmente inadvertidos, ya que permanecen inmóviles y su pelaje los camufla a la perfección con su entorno, que suelen ser suelos rocosos combinados con praderas del piso subalpino. Nosotros conseguimos detectarlas gracias a sus chillidos, cuando barruntan algún peligro comienzan a establecer un constante intercambio de silbidos entre los miembros del grupo familiar, me recordó este comportamiento mucho a los suricatos africanos. En alguna ocasión fue el vuelo de unos cernícalos las que les hizo saltar la alarma. Es entonces cuando intentas buscarlas y no las ves, hasta que alguna decide moverse, normalmente a saltos arqueando su lomo y mostrando una preciosa cola en la que destaca el color negro.

Os dejo unas imágenes de estas marmotas, no de muy cerca pues cuando las ves, no llevas el objetivo adecuado... (ley del fotógrafo aplicado). A ver si las veis...




martes, 29 de septiembre de 2015

El vuelo del Quebrantahuesos

Tras unos días recorriendo los Pirineos y no dar crédito a tan impresionantes paisajes, sin lugar a dudas uno de los momentos más intensos y que se nos quedó impregnado en las retinas para siempre, fue el majestuoso vuelo de la mayor y más bella de las rapaces carroñeras, el quebrantahuesos.

Pudimos observarlo por primera vez en una salida dentro del parque nacional de Aigüestorte, un adulto y un subadulto sobrevolaban unos riscos algo lejanos. Pero el momento más emocionante e inesperado se produjo en el parque natural de la Sierra y Cañones de Guara. Tras una mañana a la espera de poder observarlo en un lugar donde supuestamente había un comedero cercano, decidimos marcharnos algo tristes tras la infructuosa espera. Nos encontrábamos ya metidos en el coche a punto de salir y decidiendo el itinerario del día, cuando justo en ese momento, en un giro de cabeza divisamos un buitre enorme pero con un diseño un tanto diferente en el plumaje que nos llamó la atención, volaba a la altura de la ventanilla del coche pero la luz no dejaba visualizarlo bien. Afinamos la vista y sí, era un impresionante quebrantahuesos que se elevaba por encima de nuestras cabezas. Poco tiempo nos faltó para salir rápidamente del coche y no perder detalle. Prismáticos, cámara, cámara, prismáticos... Dió varios giros a escasos metros sobre nosotros. Parecía que nos decía, eh! esperaros!, no iros que estoy aquí! Os aseguro que cuando vives momentos tan bonitos como este, dices, merce la pena vivir para ver lo que la naturaleza nos ofrece.

Culminamos este viaje en el evento Emlobados 2015 en apoyo al lobo ibérico, celebrado en Solana del Pino (Ciudad Real), ya hablaré de ello. Allí tuvimos la ocasión de conocer a Benigno Varillas y Teresa Vicetto. Conversando con Teresa sobre este momento que vivimos, me comentó de alguien que decía... "Existen dos clases de hombres en la vida, los que han visto un quebrantahuesos y los que no". Pues bien, ya me puedo considerar orgullosamente de los que sí...

Pronto os contaré algunas cosillas más que pudimos observar en este intenso recorrido por territorio pirenaico. Por lo pronto os dejo estas imágenes del ave más bonita e impresionante y que todavía tenemos el placer de observar en el área peninsular, recientemente también en la sierra de Cazorla. Se encuentra por desgracia muy amenzada, por lo que requiere de toda la protección posible que esté en nuestras manos, para que pueda seguir surcando nuestros riscos y nuestros cielos.






Como siempre, gracias por vuestra visita...

miércoles, 26 de agosto de 2015

LA BERREA..., EN LA SIERRA DE CÁDIZ




Ya se va acercando. Pronto, las bajadas de temperatura y las primeras gotas empaparán el monte dando apertura a una peculiar sinfonía, la berrea. El ciervo entra en celo. Los machos enardecidos compiten llenos de frenesí por proclamarse vencedores y dueños de un harén de hembras. Desde finales de septiembre sus fuertes bramidos invandirán el monte mediterráneo, y en los claros y prados, exhibirán sus imponentes cuernas que en ocasiones hacen colisionar mediante riñas para demostrar quien es el más fuerte.

Sin lugar a dudas, la berrea del ciervo es uno de los acontecimientos más bonitos que se dan en la naturaleza. En los últimos años este ha ido cogiendo cada vez más celebridad, y cada vez son más las personas que quieren presenciarlo, oír el espectáculo sonoro y si es posible avistar los harenes de hembras acompañados de grandes machos. Pero lo más deseado es contemplar los enfrentamientos de estos últimos, y si la luz lo permite, captar mediante  fotografía o vídeo el impactante momento.

Desde hace dos o tres años hacia acá, llegadas estas esperadas fechas, se presencian cada vez más personas en las carreteras de las sierras de Cádiz, en especial en las del parque natural los Alcornocales, donde el ciervo es más abundante. Cuando cae la tarde, coches con familias enteras deciden acercarse a, "escuchar la berrea". Estas quedadas familiares normalmente suelen acordarse por vía whatsapp o vía facebook, donde la información de los mejores sitios para poder presenciarla fluye con facilidad. Hay zonas que se convierten en una auténtica feria..., coches que circulan lentamente cuyos ocupantes no despegan ojo de cualquier movimiento en el monte, filas de coches aparcados en los escasos centímetros de arcén, si es que lo hay, y si no ocupando media carretera, que por norma general son estrechas. Cuando aparcan, las familias enteras se bajan cerrando las puertas fuertemente y toman posición creando una auténtica barrera humana en sus márgenes. Entonces, comienzan a establer una comunicación también sonora como los ciervos, pero entre ellos.  Los componentes de menor edad, los niños, como es normal por estos lares, suelen chillar. De entre los componentes adultos, el que ha tomado la mejor posición cuando divisa un venao,  exaltado da el aviso a la familia entera por medio de la peculiar comunicación sonora, entonces todos entusiasmados dan paso a dar coordenas a los otros componentes miembros de donde se encuentra el susodicho venao... Cuando ya se aburren y ya está, como se suele decir por aquí, "todo el pescao vendio", se procede a la retirada, pero no antes sin haber lanzado entre ellos algún que otro berrido queriendo hacer la gracia, o a lo mejor es que es su lenguaje también...

Ya sé que pensarán que soy un muermo siempre con estas cosas, y comprendo perfectamente que todos queramos estar presentes en un evento tan espectacular como este. Pero daré aquí una serie de recomendaciones, para poder disfrutarlo causando la menor perturbación en el medio. Recuerdo, que en el monte no solo viven ciervos, vive también una gran diversidad de especies, algunas de ellas muy sensibles a la presencia humana, por lo que se debe ser respetuosos con esta y con todo el entorno, que bien se lo merece.

La primera recomendación que doy es que los grupos sean lo más reducido posible, yo misma organizaba grupos hace tiempo para ello, y se lo que supone cuando el número es elevado, por más que se pretenda guardar silencio, es imposible. Si es una quedada entre varios coches, lo mejor es que se dirijan a zonas diferentes, todo lo que os tengáis que comunicar lo hacéis luego tomando unas cervezas en la venta de turno, pero mejor a la hora de observar, separados. Esto evitará colapsos en las carreteras, y voceríos inevitables. No dejad el coche aparcado en cualquier sitio, no en toda zona buena se puede aparcar, y no a las buenas o a las malas tenemos que hacerlo, si no se puede no se puede..., buscad otro sitio. Cuando os bajéis, hacedlo con precausión, no chillando, y cerrad las puertas con suavidad, no sabéis como incordian los portazos. Intentad que no se os vea tan fácilmente, usad ropa oscura, verde oscuro o camuflaje, es lo más apropiado, ndad de rojos y blancos que brillan a la luz de la luna, esto evita alertar a la fauna. Cuando os bajéis evitad entablar conversaciones, estas las dejáis para luego ahora lo que importa es solo observar. Y cuando diviséis un ciervo, no emocionaros tanto hombre!, o conteneros un poco, se puede os lo aseguro... Y por último importante, no pisotearlo todo donde estéis y muchímo menos dejéis botellas, bolsas de plásticos, envoltorios de comida... Y menos aún, cuando os entren ganas de hacer pis, esto sobre todo va dirigido a las féminas, no dejad los pañuelitos de papel ahí tirados como gorrinas, lo cogéis con las manitas lo metéis en una bolsita, y en la basura de vuestra casa lo depositáis...

Bueno estas son mis recomendaciones para que todos podamos disfrutar, de una manera inteligente y repetuosa de estos maravillosos eventos que nos ofrece la naturaleza, porque esta sufre más de lo que os podáis imaginar este tipo de conglomeraciones humanas. Así que concienciémosnos, de que esta ya estaba allí antes que nosotros, por lo tanto tiene derecho a ser respetada.

Y a disfrutar, pero con respeto...

martes, 18 de agosto de 2015

GRANDES PREDADORES, NECESARIOS PARA LA CONSERVACIÓN DEL MONTE


El otro día, como es habitual, recorríamos uno de esos caminos que atraviesan las sierras de Cádiz. A mitad de este nos detuvimos ante un inesperado encuentro, una cabra montés se encontraba en uno de sus márgenes, comiendo alguna de las hierbas algo secas y ásperas ya presentes desde mediados del estío. Ante su caracter poco huidizo, movimientos lentos, y ojillos que cerraba y dejaba entreabiertos con algo de dificultad, nos hizo deducir que el animal se encotraba algo enfermo. No sé si sería la sarna, que acusa en estas sierras a parte de las poblaciones de cabra montés, pero si evidenciaba signo de alguna enfermedad.

Entonces, te vuelves a replantear como miles de veces, el perfecto papel que desempeñan lo grandes predadores, o lo que es lo mismo, aquellos que ocupan el nivel más alto en la cadena trófica. Hace muchos años que el lobo desapareció de estas tierras. Ahora la mala gestión de los cotos de caza ha propiciado que exista una sobrepoblación de ungulados. Existen zonas donde la sobrecarga de venaos no deja crecer la vegetación y el bosque no se regenera. Por otro lado existe un alto grado de hibridación entre jabalíes con cerdo ibérico, y cada vez son más abundantes. También se han introducido especies foráneas como el gamo y el muflón, que ya se han extendido por gran parte de las zonas protegidas de la provincia. Existen enfermedades que afectan a los ungulados, como la ya mencionada sarna. Todo esto se regularía de una forma natural si existiesen los grandes predadores, los carnívoros que ocupan ese lugar más alto, y que de manera instintiva y natural mantienen el monte equlibrado y sano.

Soy bastante pésimista con la vuelta del gran cánido a estas tierras del sur, los diferentes sectores en el medio rural serían el primer y monumental obstáculo. Luego la administración no estaría por la labor en aceptar un engorro más, y como sucede con el lince ibérico en estos territorios volvería la cabeza para otro lado. Eso de calentarse la mollera y afrontar problemas a nuestros consejeros y delegados de medio ambiente no se les da muy bien, aunque ocupen cargos con esa responsabilidad... En fin, matendremos la no sé si ilusa esperanza, de que algún día en un futuro aunque aún muy muy muy lejano, el gran carnívoro campee de nuevo y libremente por estos parajes del sur peninsular.


viernes, 14 de agosto de 2015

NO SEAS CURIOSO, JOVENZUELO!

A veces estos zorrillos se muestran demasiado confiados... Ya sabéis, especiealmente en estas fechas mucho cuidado en las carreteras y no sobrepasad los límites de velocidad. Y en aquellas que circulan por el medio rural, id con mayor precaución, cualquier animalito de estos se nos puede cruzar...








martes, 4 de agosto de 2015

No sé a ustedes...


No sé a ustedes, pero cuando ya entramos en el mes de Agosto aquí en el sur, hay algo que  me empieza a inquietar. Es un inquietud agradable, una sensación que me va invadiendo conforme el verano pasa, como si durante todo el año estuviese esperando ese placentero momento que está por llegar y que ya se encuentra a la vuelta de la esquina. Cuando va mermando el calor, y cuando las nubes vuelven a aparecer. Ya hace tiempo que los girasoles se secaron, y los pastos ya están segados incluso labrados. Los cieleos empiezan a barruntar algo, y el aire es más húmedo, más puro. Ya sé, aún quedan días de estío, y de levante, y de mucha calor, pero ya los días son más cortos, y cuando cae la tarde, vuelve esa bonita y melancólica sensación... 


CORRE!


lunes, 13 de julio de 2015

Mundo de asfalto IV

En vacaciones extrememos la precaución en las carreteras, sobre todo en aquellas que discurren por zonas rurales. Pongamos especial atención cuando circulemos de noche, momento en el que se mueve la mayor parte de nuestra fauna.



jueves, 9 de julio de 2015

Agujas colinegras al atardecer

No suelo poner serie de fotos, ya que cada vez soy más de la opinión que mejor una foto original y que tenga impacto, o sea que quede bien grabada en la mente del espectador, en vez de muchas imágenes de lo mismo de tal forma que no se retiene ninguna, y además cansa. Pero en esta ocasión voy hacer una excepción, primero porque las series suman secuencias, y segundo porque ese día había una luz preciosa y en esa misma secuencia creo transmite serenidad.

Sin más, espero que os gusten.






                         





Como siempre, gracias por vuestra visita.

martes, 16 de junio de 2015

Perdices


Y acude la perdiz con las últimas luces a los caminos, a espolvorear sus plumas con placenteros baños de arena... 



Ratonero al atardecer


 Posaba apacible el ratonero al caer la tarde...



martes, 9 de junio de 2015

lunes, 8 de junio de 2015

Digitalis y polinizador

Se adelantó el estío, la dehesa extremeña comienza a barruntar una posible sequía.  El pasto ha amarilleado y las chicharras ya cantan al unísono las horas centrales del día. Hace dos semanas las digitalis comenzaron a despuntar su floración, pero las altas temperaturas acusaron tanto que en su empeño dejaron parte algo raquíticas. Muchas de sus flores se han secado y no han alcanzado toda su esplendidez. Todavía permanecen algunas en las zonas más frescas y sombreadas donde el implacable sol no las ha deteriorado. He llegado a tiempo para presenciar el zarandeo de sus campanas con el viento y escuchar el zumbido de sus polinizadores merodear.



jueves, 4 de junio de 2015

Charcas y estanques llenos de vida

Hoy os dejo este video que trata la vida que surge en la primavera en las charcas, fuentes y estanques. Estos se colonizan y llenan de vida, y son de lo más divertido observarlos.

Espero que os guste las secuencias, a pesar de la improvisacción de las imágenes sin trípode...

Charcas y estanques llenos de vidas from Esmeralda Ramos on Vimeo.

Como siempre, gracias por vuestra visita...

martes, 26 de mayo de 2015

Pequeña bolita de plumas

Siempre que paso a la misma hora, allí estás, pequeña bolita de plumas...

jueves, 21 de mayo de 2015

Frágil

Quién dijo que su fragilidad no tenía sentido...

lunes, 11 de mayo de 2015

TIEMPO DE PEONÍAS

Bajo la lluvia y un cielo plomizo, destacan a lo lejos sus pétalos de color fucsia. En unos instantes, una tenue luz escapa del sol y los ilumina. Resalta con clamor su florescencia y sus hojas resbalan las gotas que empaparon la flor.


lunes, 27 de abril de 2015

lunes, 23 de marzo de 2015

Como la música


No sé si os habrá pasado alguna vez, pero me suele pasar. A veces doy con una música, una música que me llega al corazón, entonces la pongo una y otra vez, seguidamente, sin parar. Puede quizás que parezca un comportamiento algo irracional, pero pienso, ¿qué es lo racional? Si una música te llega al alma te conmueve, la puedes escuchar infinitamente y cada vez que la oyes, cada nota te hace vibrar y la sientes como si la oyeses por primera vez. 

Me pasa lo mismo con ciertos momentos que capto en fotografía, los capto porque son momentos que percibo en lo más profundo del corazón. A veces se trata simplemente de una luz, un reflejo..., algo insignificante. Pero que me resultan un instante único, que por más que los miro, me hace vibrar el alma como si los viese por primera vez.

lunes, 9 de marzo de 2015

Los días más largos y las noches más cortas

Son estos atardeceres quizás los más llamativos del año. El cielo y su resplandor combina un extenso gradiente de tonalidades, rojos, anaranjados, azules, morados... Cielos que parecen pintados por sutiles pinceladas y que trazan un boceto, donde las heterogéneas nubes componen un lienzo de diseño natural.

Son estos momentos en los que los días van siendo más largos y las noches más cortas. Es curioso como nosotros, que tenemos actividad diurna sacamos más provecho a estos días, ya que el aumento de horas de luz hace que nuestro cuerpo se mantenga activo durante más horas también. Esto por supuesto no sucede porque si, todo en la naturaleza tiene una explicación, y es que las diferentes intensidades y tonos de luz influyen en la química de nuestro cuerpo regulando de esta forma nuestra actividad.  Se acerca el solsticio de verano, momento en el que llegaremos al día más largo del año y la noche más corta, a partir de entonces los días volverán de nuevo a menguar. Pero tranquilos, hasta entonces todavía nos quedan muchos días de muchas horas de luz, para sacar provecho...


miércoles, 25 de febrero de 2015

Fuentes y estanques llenos de vida

Se encuentran ya fuentes, estanques y abrevaderos, colonizados por diversidad de plantas acuáticas. Anfibios andan barruntando la primavera y se lanzan a las aguas claras para depositar sus puestas. Las salamandras que asoman de sus húmedos escondrijos, son algo diferentes, y expulsan sus larvas directamente una vez estas ya están casi formadas. Las diminutas salamandras permanecerán un largo tiempo escondidas entre las algas y plantas sumergidas, pero con un poco de atención y paciencia, las podremos ver...






miércoles, 21 de enero de 2015

GRAN CIERVO


Oh mi gran ciervo!, que el otro día mostraste tu colosal cornamenta.

Oh mi gran ciervo!, ingenuo y ajeno a que yo te estaba observando.

Oh mi gran ciervo!, ten cuidado y no la muestres tan inocente, pues todos los que te observan no lo hacen porque te admiran, o puede que te admiren, pero tendido muerto y con el plomo incrustado en tu pecho.

Oh mi gran ciervo!, no la muestres y cuando escuches los ladridos, huye! Todos no te quieren vivo en el monte, tu que eres el rey, pero huye! Porque no tendrás nada que hacer, este adversario es más peligroso y cruel que aquel que encuentras en la lucha por tu harén. Este adversario no siente pasión, y ansioso te perseguirá hasta darte muerte y arrancarte tu titánica cornamenta, para colgarla en la pared.

Oh mi gran ciervo, huye...


lunes, 19 de enero de 2015

Mis queridos Alcornocales, siempre.


No sé si es el apego de haber vivido y respirado desde pequeña este lugar, o es que realmente tiene algo, que atrapa y cautiva a aquel que se consagra a sus entrañas, a su esencia y existencia, a su alma . Por que sí, estos parajes tienen alma.

Cada punto, cada dirección a la que miras te cuenta cosas, te muestra y te enseña sus secretos, que nunca nadie desveló. Cuantos misterios, me revela cuando curioseo entre sus quejigos, entre sus alcornoques, entre sus jaras y sus lentiscos, sus brezos, sus valles y sus veredas, sus peñascos caprichosos de arenisca que de repente asoman de entre el matorral. 

Las mañanas te regalan brumas que se retienen cuando los vientos la atraviesan, y los atardeceres te seducen con cálidas luces que te embriagan de sosiego y serenidad.

No, no estoy fascinada, o quizás sí, ¿cautiva?, ¿encantada?, ¿de su esencia? Puede ser..., sí.